¿QUÉ PAPEL JUEGA EUROPA EN LA LUCHA CONTRA LA POBREZA? La sociedad pregunta a los partidos cómo van a hacer frente a la crisis y a la desigualdad
Marga Ferré (IU), José Ignacio Salafranca (PP) y María Muñiz (PSOE) han participado en este encuentro de partidos políticos y sociedad civil. La Alianza Española contra la Pobreza – compuesta por sindicatos, ONGD y organizaciones ecologistas, de jóvenes, mujeres, colectivos y movimientos ciudadanos, que representan a más de 1.000 organizaciones sociales- ha planteado las preguntas en función de los temas más preocupantes y sobre los que existen reivindicaciones claras por parte de las organizaciones sociales.
La eficacia de la Ayuda Oficial al Desarrollo es una de las principales preocupaciones de la sociedad civil, ya que se estima que el 50% de la AOD no va dirigido a alcanzar el objetivo último de acabar con la pobreza. Si bien el PP ha recordado que la Unión Europea es el principal donante en la actualidad, desde el PSOE aclaran que no basta con dotar de eficacia los procedimientos de ayuda sino que hay que buscar la eficacia en el objetivo final, en el desarrollo. Son partidarios de concentrar la ayuda en ciertos países empobrecidos y en determinados sectores donde el país donante tenga un valor añadido, y así lo van a presentar en el parlamento europeo durante la presidencia española el próximo año. Desde IU plantearon la necesidad de cambiar las políticas, porque en esta situación de crisis mundial la ayuda al desarrollo no es suficiente.
Otro de los temas preocupantes para la ciudadanía es el Cambio Climático, y la relación inequívoca entre nuestro actual modelo de crecimiento económico y la degradación del medio ambiente. Si bien todos expusieron la necesidad de reducir las emisiones y los efectos del calentamiento global, cumpliendo con el protocolo de Kyoto, la realidad es que España es el país europeo que más se aleja de las medidas y compromisos ambientales suscritos, y no hay propuestas políticas que busquen un cambio efectivo en estos términos.
La normativa europea en materia de migración y relaciones comerciales ha tenido un fuerte rechazo por parte de organizaciones sociales, demostrando que frena el desarrollo de los países empobrecidos y que se establecen relaciones desiguales entre los países europeos y los países del Sur. En este caso, IU recordó que tanto PSOE como PP estuvieron de acuerdo el la votación de la llamada Directiva de la Vergüenza, donde se da un claro retroceso en el cumplimiento de los derechos de las personas inmigrantes y donde se permite y se alarga en internamiento en los CIE, que son los campos de concentración actuales. Por su parte PSOE y PP coincidieron en señalar que es una directiva necesaria para ordenar la inmigración como tema común europeo.
En cuanto a las relaciones comerciales el PP recordó la importancia de la cláusula democrática para firmar acuerdos de asociación, que no de libre comercio. Por otro lado, se preguntó por las multinacionales europeas que pueden instalarse en cualquier país de América Latina, África y Asia sin que exista la posibilidad de denuncia ante la justicia española en caso de degradar las condiciones de trabajo y violar los derechos humanos. Ante esta realidad, PSOE reconoció el papel fundamental del sector privado para incentivar el crecimiento económico y que hay que colocar la inversión en el ámbito de la Responsabilidad Social de las empresas. Para el PP las empresas multinacionales también contribuyen al bienestar de los países siempre dentro del respeto a los Derechos Humanos. IU destacó que el sistema permite los abusos, como la subcontratación hasta límites en los que es difícil descubrir la empresa responsable final.
Para la Alianza la deuda externa es una de las preocupaciones centrales, así como la justicia fiscal. Después de ver la respuesta de las instituciones tras la crisis financiera, se ha planteado a los partidos la posibilidad de asumir otras medidas (tasa Tobin a las transacciones especulativas de capital, la eliminación de los paraísos fiscales, la abolición de la deuda externa, la creación de impuestos globales, etc.) que contribuyan a mejorar la vida de muchas personas. La respuesta ha sido desigual; para el PP con la deuda hay que buscar soluciones dentro de cada país y no en el seno de la UE, no considera beneficioso sino perjudicial los impuestos globales o la tasa Tobin. El PSOE apuesta por la condonación de deuda y la conversión de deuda por desarrollo de los países más pobres, así como por la lucha contra los paraísos fiscales; mientras IU reconoce en sus oponentes muy buenas intenciones pero pocos hechos ya que habría que empezar por evitar el fraude fiscal en España.
También se trataron temas relativos a la convergencia social, el trabajo digno y los servicios públicos. Desde la Alianza se expresó la preocupación por el marco de creciente liberalización y privatización de los servicios públicos con un impacto muy negativo sobre la calidad de estos y sobre el empleo. Se enfrentan aquí las diferentes concepciones políticas, la que considera los servicios públicos como derecho del ciudadano y la que los incorpora al mercado competitivo, bajo supervisión estatal.
La Política Agraria Común ha sido otro de los temas objeto de debate. Los subsidios asociados a la PAC han puesto en peligro la seguridad alimentaria de los países del Sur y en estos momentos en que está pendiente la reforma de la PAC, el papel de estas políticas es muy importante en la lucha contra la pobreza. Para el PSOE hay que ir disminuyendo el proteccionismo y garantizar el desarrollo rural y la conservación del medio ambiente. El PP considera que hay que lograr el equilibrio entre la protección de nuestros agricultores y la ayuda a los países en vías de desarrollo, defendiendo el principio de preferencia. Mientras IU considera que la PAC es un problema porque se incentiva la no-producción y se fomenta el despoblamiento de las zonas rurales. Este partido defiende que no se destine tierra cultivable a los agrocombustibles sino a cereal para alimentación.
Como cierre de este encuentro, desde el público se lanzó una pregunta relativa a la situación del Sáhara Occidental a la que los representantes políticos respondieron así: PSOE apoya las resoluciones de ONU y colabora con ayuda humanitaria para la población saharaui, pero no puede romper relaciones vitales con Marruecos (seguridad, medio ambiente, migraciones, etc.) reconociendo oficialmente a la RASD. PP se alinea con ONU para pedir el referéndum. IU se siente partido hermano del Frente Polisario y considera que tras 30 años la ONU no va a actuar con decisión y hay que presionar por responsabilidad histórica como antigua potencia colonial.
Al encuentro han sido invitados todos los partidos políticos con representación parlamentaria en esta legislatura, así como partidos sin representación que han tenido posibilidad de exponer sus propuestas en el turno abierto.