Los Objetivos de Desarrollo del Milenio: aún más lejos
Madrid, 23 de marzo de 2011 – Estamos aún más lejos de alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Esta es una de las conclusiones extraídas del anuario "Las políticas globales importan. Análisis de los retrocesos y rupturas en la práctica de la lucha contra la pobreza y la desigualdad en 2010", que la Plataforma 2015 y más ha presentado esta tarde en el Ayuntamiento de Fuenlabrada. El anuario, versión española del informe de la red mundial Social Watch, ofrece un balance crítico con las políticas globales y nacionales de lucha contra la pobreza.
De los 42 indicadores utilizados en el informe para conocer el grado de cumplimiento de los ocho ODM, como la población con ingresos inferiores a un dólar al día, la tasa de mortalidad materna o las emisiones de dióxido carbono, sólo en 11 de ellos (el 26%) se alcanzarían los objetivos marcados para el año 2015; en los restantes 31 (el 74%), se esperan progresos moderados, lentos o incluso retrocesos. África septentrional, América Latina y Caribe y Asia Oriental son las regiones que presentan un panorama más esperanzador; en el otro extremo se encuentran Asia Occidental y sobre todo, África Subsahariana, donde no se cumplirían ninguno de los objetivos marcados. Aunque los efectos de las múltiples crisis -alimentaria, energética, financiera, económica y medioambiental- influyen negativamente, el informe se muestra claro en señalar que el verdadero obstáculo es el incumplimiento de los compromisos existentes por parte de los gobiernos, cuyas políticas seguirían preservando los intereses de los más poderosos.
Los efectos de la crisis financiera ya comienzan a ser cuantificables, por ejemplo en el impacto en el mercado: no sólo hay mayor desempleo sino que éste es más vulnerable- Así, para el conjunto de regiones en desarrollo un 30% de las personas con trabajo estaba en situación de pobreza extrema en 2009. En África Subsahariana se prevé que el 62% de la población ocupada en 2015 se encuentre en situación de pobreza extrema. En cuanto al hambre no se esperan mejores datos, siendo especialmente grave la situación para los niños y niñas menores de 5 años. Aún hoy 104 millones de niños y niñas sufren problemas de desnutrición.
La igualdad de género continúa siendo un capítulo pendiente. Aunque en el área educativa se observan grandes avances y la paridad de género en educación primaria se alcanzará en el conjunto de regiones en desarrollo, todavía las desigualdades perduran en casi todos los ámbitos. La mortalidad materna continúa siendo un problema inaceptable en los países en desarrollo (450 muertes por cada 100.000 nacidos vivos) y sólo se ha reducido un 6% entre 1990 y 2008, cifras que según el informe ponen de manifiesto las desigualdades en los países pobres, ya que el 99% de las mujeres que mueren durante el embarazo o el parto viven en las regiones en desarrollo.
La incoherencia entre los discursos y la práctica
El octavo objetivo, la alianza mundial para el desarrollo, es el que muestra menores avances a pesar de dependr fundamentalmente de los gobiernos de los países ricos. Según el informe la falta de avances está impidiendo el progreso hacia la consecución de los otro siete objetivos y el estallido de la crisis financiera ha enfriado aún más el compromiso que estos países suscribieron en los acuerdos firmados para la lucha contra la pobreza. El caso más claro es el descenso de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) y las estimaciones para 2010 muestran que el volumen de ayuda total será considerablemente menor a los 154.500 millones comprometidos.
El informe saca a relucir el trabajo de la sociedad civil para denunciar la falta de voluntad política para transformar las arquitecturas internacionales de las finanzas, del comercio y de la ayuda, y destaca la necesidad de llevar a cabo medidas como el establecimiento de un Impuesto a las Transacciones Financieras Internacionales o la lucha contra la evasión fiscal que practican las multinacionales y que supone una pérdida de ingresos fiscales de miles de millones de euros en los países empobrecidos. En el caso de África desde 1070 se estima que ha perdido 854.000 millones de dólares en flujos financieros ilícitos.
El caso español: el quiebre del discurso en la política de cooperación
En cuanto al balance de la cooperación española, la Plataforma 2015 y más observa que la crisis económica financiera y económica global ha supuesto el abandono del "discurso cosmopolita" que el Gobierno español había mantenido hasta el momento en materia de cooperación y que se concreta fundamentalemente en un retroceso en la AOD y en la inacabada reforma del sistema institucional de cooperación internacional.
La reducción anunciada de 800 millones de euros de AOD entre 2010 y 2011, alejaría "dramáticamente" el compromiso de destinar el 0´7% de la Renta Nacional Bruta (RNB) a la AOD en 2012, reiterada en foros nacionales e internacionales por el Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. El informe considera que los efectos negativos de la crisis han sido en cierta medida externalizados hacia los países con menos niveles de desarrollo, y este quiebre del discurso tendrá consecuencias no sólo en el empeoramiento de la situación de millones de personas, sino también en la legitimidad del sistema de cooperación internacional y en discurso del Gobierno español.
El anuario "Las políctias globales importan. Análisis de los retrocesos y rupturas en la práctica de la lucha contra la pobreza y la desigualdad en 2010", también incluye los índices elaborados por la red Social Watch sobre Capacidades Básicas (ICB) y de Equidad de Género (IEG) en más de un centenar de países, así como las reflexiones y propuestas sobre la equidad de género, la soberanía alimentaria o la memoria histórica.