La población contra el golpe de estado llena las calles de Honduras
En Tegucigalpa, se concentraron las personas que llegaron caminando a la capital desde los departamentos de Olancho, Comayagua, El Paraíso y el sur del país. Miles de manifestantes se acercaron a la Casa Presidencial, protegida por un fuerte dispositivo militar, para pronunciarse contra Roberto Micheletti y exigir que abandone el poder. A la concentración se sumaron varios miembros del gobierno depuesto de Zelaya. La marcha fue pacífica y sin incidentes, aunque al término de esta se produjeron actos vandálicos en las inmediaciones de la Universidad Nacional.
Manifestación en Tegucigalpa (Foto Diario Tiempo)
Mientras en San Pedro Sula, de forma ordenada y pacífica se daban cita hombres y mujeres contra el Golpe de los departamentos de Yoro, Atlántida, Colón, Puerto Cortés, Santa Bárbara, Lempira y Copán para exigir la vuelta al orden constitucional. Cuando llegaron frente a la Catedral se encontraron con un dispositivo policial dotado con gases lacrimógenos y armas. Hugo Maldonado, presidente del Comité de Derechos Humanos, lamentó que los jefes policiales, pese a los pedidos hechos por la resistencia y el ambiente distendido y tranquilo de la concentración, hubieran enviado efectivos policiales al centro de la ciudad.
Parque Central de San Pedro Sula (Foto Diario Tiempo)
Si la situación no vuelve a la legalidad constitucional y democrática con la restitución de Zelaya, el Frente Nacional Contra el Golpe de Estado, asegura que “extenderá las acciones pacíficas de resistencia en todo el territorio nacional para denunciar la ilegalidad de un futuro proceso electoral avalado por un gobierno golpista”.
Manifestación en San Pedro Sula (Foto Diario Tiempo)
Coincidiendo con esta Marcha Nacional de Resistencia las organizaciones hondureñas hicieron un llamado internacional a la movilización en un Día de Acción Global por Honduras. En Madrid, se realizó una concentración ante la embajada de Honduras para pedir el cese de la represión y de las violaciones de derechos humanos y el fin del gobierno golpista de Micheletti.