La Plataforma 2015 y más denuncia la falta de transparencia y participación en el proceso de consultas del IV Plan Director de la Cooperación Española.

Esta decisión de no participar en las Jornadas sobre el IV Plan Director se toma en base al mecanismo de participación propuesto por la SGCID en el proceso de elaboración del borrador, y en estas Jornadas en particular, que, a nuestro entender, no garantiza los mínimos exigibles en materia de transparencia y representatividad del conjunto de actores de la cooperación. Esta participación no es abierta a todas las organizaciones sino que tan sólo es accesible mediante invitación, decidida previamente y sin listado público por parte de la Subsecretaría de Estado de Cooperación. Al desconocer los criterios de esta selección, consideramos que nuestra asistencia al ser invitados, podría malinterpretarse como una aceptación de un mecanismo poco transparente y controlado unilateralmente por el gobierno.

La participación de los diferentes actores de la cooperación en el diseño del principal documento de política que debería guiar de forma estratégica la cooperación española para los próximos cuatro años no es un hecho menor que pueda ser despachado sin reflexión. De hecho, en la última evaluación que el CAD hizo a la Cooperación Española se destacaba el altísimo valor que esta participación había tenido precisamente en la elaboración del Plan Director anterior y cómo el Gobierno había asumido su responsabilidad de facilitar y favorecer esta participación de forma amplia y decisiva. No encontramos razones para asumir limitaciones al respecto en esta ocasión. Parece esencial, en el ámbito democrático de nuestro país, que los diferentes actores puedan tener la autonomía suficiente para decidir sobre el contenido y la forma con el que desean participar en el diseño de las políticas públicas, por lo que no consideramos que deba ser el sector gubernamental quien, en lugar de facilitar y promover dicha autonomía, decida unilateralmente a quiénes invita o no. Menos aún sin publicar los criterios que utilizó para tomar dicha decisión ni los resultados de la misma.

Por otro lado, consideramos que el borrador presentado no reúne la claridad, precisión ni orientación estratégica suficiente como para sugerir enmiendas parciales según la metodología propuesta. Nuestras consideraciones generales sobre el mismo exigen un marco de diálogo y discusión más amplio que este proceso no está ofreciendo a las organizaciones.

Con respecto al borrador del IV Plan Director de la Cooperación Española estas son nuestras preocupaciones fundamentales al respecto:

a) la ausencia de un marco presupuestario, en el actual contexto de tres años de reducción del mismo a la mínima expresión, pone seriamente en cuestión cualquier consideración estratégica y operativa contenida en un Plan Director;

b) apreciamos debilidades doctrinales en la formulación de la política que sugieren un alto riesgo de instrumentalización de la política de cooperación por parte de otros intereses alejados de la lucha contra la pobreza y la desigualdad internacionales;

c) en lugar de dotarnos de una estrategia sólida respecto de las agendas internacionales de eficacia en el desarrollo y de coherencia de políticas con el desarrollo, el documento recoge versiones parciales y reduccionistas de ambos desafíos;

d) preocupan sobremanera la ausencia de una estrategia de consolidación de la cooperación descentralizada así como de avanzar en la siempre pendiente reforma del sistema de cooperación;

e) es notable la confusión, a menudo hasta la contradicción, respecto de la propia visión de desarrollo y del perfil que las políticas de cooperación deben mostrar para garantizar los resultados.

En general, el documento requiere una profunda revisión conceptual, puesto que acumula imprecisiones y confusión de planos en muchas de sus partes.

Consideramos que el texto no presenta la suficiente madurez como para expresar cuáles son las apuestas de carácter estratégico que orientarán la consolidación y el refuerzo de una política pública que debe atender a desafíos crecientes y urgentes, como apunta el contexto internacional.

Aunque la Plataforma 2015 y más no participe en estas Jornadas, nuestro interés es colaborar activamente en el diseño, ejecución y seguimiento de la política pública de cooperación, como muestran algunos de los aportes ya realizados previamente para introducir en el IV Plan Director.

Un proceso transparente y participativo desde el inicio es clave para contribuir a una política de cooperación fortalecida y consolidada, lo que sin duda será un al avance de la coherencia de las políticas públicas con el desarrollo.